En algún momento lo leí, y ahora que Vicente Baos lo mencionó en su Twitter tendré que compartirlo. Se trata de un artículo tajante, directo al grano, de hace casi 10 años, y que ahora aparece traducido en un blog sin dioses. El resumen:
¿Por qué tantos pacientes inteligentes en otros aspectos, y sus terapeutas, pagan considerables sumas por productos y terapias de medicina alternativa, aún sabiendo que la mayoría de ellas son inútiles o peligrosas o no han sido sujetas a rigurosas pruebas científicas?. Sigue leyendo




