Como sabemos, los sesgos en los ensayos clínicos pueden magnificar los resultados. Por eso es interesante el análisis que hacen Crocetti MT, et al, sobre el riesgo de sesgos en los ensayos clínicos aleatorizados publicados en 8 revistas importantes (Pediatrics, Journal of Pediatrics, The Lancet, Archives of Pediatrics and Adolescent Medicine, Journal of the American Academy of Child and Adolescent Psychiatry, Pediatric Infectious Disease Journal, New England Journal of Medicine, Journal of the American Medical).
Los autores evaluaron el riesgo de sesgos en los ensayos publicados durante 1 año, usando los métodos de la Colaboración Cochrane. Y después buscaron asociaciones entre el riesgo de sesgo y la fuente de financiamiento, el tipo de intervención, el registro público del ensayo, y si fue realizado de manera multicéntrica.
Aumenta el riesgo de sesgos:
- Financiamiento por la industria farmacéutica: más riesgo de sesgos en la aleatorización (aOR 6.1, IC95% 1.7 a 21.89).
- Estudios sobre terapias de comportamiento o educacionales: más riesgo de sesgos en la aleatorización (aOR 2.8, IC95% 1.06 a 7.36) y en la ocultación de la secuencia (aOR 4.09, IC95% 1.69 a 9.90).
Disminuye el riesgo de sesgos:
- Registro público del estudio: reducción en riesgo de sesgo en la aleatorización (aOR 0.33 IC95% 0.15 a 0.71).
Una evidencia más que resalta la importancia del registro de todos los ensayos clínicos, y del papel que puede tener la industria en los mismos.
Giordano Pérez Gaxiola
Departamento de Medicina Basada en la Evidencia
Hospital Pediátrico de Sinaloa