No sé si a todos les pase, pero a mí se me olvidan algunas fuentes obvias de información pediátrica. Como ejemplo están los documentos de salud infantil de la Organización Mundial de la Salud, los cuales pueden obtenerse en este enlace.
Entre los más recientes, destacan el libro de bolsillo para el cuidado hospitalario de los niños, el reporte anual de mortalidad infantil y las recomendaciones para condiciones comunes.
Desde el aspecto metodológico destaca cómo la OMS utiliza el sistema GRADE para gradar la calidad de la evidencia y emitir recomendaciones. Pero claro, algunos temas no están libres de controversia, como el caso del oseltamivir o las recomendaciones sobre el tratamiento del choque en niños.
Giordano Pérez Gaxiola
Departamento de Medicina Basada en la Evidencia
Hospital Pediátrico de Sinaloa